Quintonil obtuvo el lugar número 35 de los mejores restaurantes del mundo en la lista de San Peregrino.

Es una versión moderna de toda la comida mexicana. Jorge Vallejo recupera los sabores tradicionales, alguna vez leí que te querían hacer sentir en casa y con nosotros lo lograron.

Fue una cena sin pretensiones, un lugar sencillo pero elegante, nos ofrecieron un cóctel de la casa para comenzar con hojas de quintonil, hasta ahí supe que era la hoja de la planta del amaranto, estaba muy fresco. Fue la mejor opción para comenzar, después los platillos fueron llegando, como sorpresa un arroz cremoso que viene con un huevo, y un marlín en salsa verde que recordaré toda mi vida.

Pedimos un vino mexicano de viñas de garza para empezar y como platos fuertes un diezmillo de res en pulque y un pato espectacular en salsa de recado negro, no había lugar para el postre pero teníamos que hacerlo así que pedimos el flan que valió muchísimo la pena .

Muchas veces vamos a estos restaurantes por probarlos y poder hacer nuestra propia crítica sobre si sí merece estar entre los mejores del mundo, pero con Quintonil eso es lo de menos. Espero el día para volver a la Ciudad de México y probar otros platillos.